Embargada planta de ensamblaje de General Motors Venezuela
Embargada planta de ensamblaje de General Motors Venezuela.
Previamente la compañía había anunciado, a través de un comunicado de prensa, el cese inmediato de sus operaciones en el país.
La ocupación de las instalaciones, es por la deuda de 476 millardos que data de hace 17 años. El litigió tiene sus orígenes porque un exconcesionario de Maracaibo, estado Zulia, (Centro Mercantil Automotriz Latino) demandó a la empresa por un total de 476 millardos de bolívares en activos por la cancelación de la concesionaria por ineficiente desempeño. El monto es considerado por la transnacional como excesiva, y causante de una operatividad inviable de manera permanente.
General Motors aseguró que el embargo fue dictado en total desconocimiento del derecho a la defensa y al debido proceso, y produjo un daño irreparable a la compañía, a sus 2.678 trabajadores, a 79 concesionarios en todo el país venezolano y a sus proveedores, que representan más de 55% de la industria nacional de autopartes.
Como en 17 años los representantes de la ensambladora no aceptaron conciliar, el Juzgado Tercero de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil y del Tránsito de la Circunscripción Judicial del Estado Zulia, determinó el embargo.
Ante la falta de suministros por la imposibilidad de acceder a dólares para realizar adquisiciones; desde el año 2015 fue la última vez que General Motors colocó vehículos en el mercado. Ese año, la planta trabajó a un 11,23% de su capacidad al fabricar solo cinco mil 52 unidades.
Por lo pronto, las autoridades públicas, asumieron el control de la empresa impidiendo el desarrollo de las actividades. De manera extraoficial se conoció a través de un informante que General Motors antes del embargo, estaba haciendo todo lo posible por intentar permanecer en el país, pese a las dificultades para adquirir los insumos importados por el control cambiario.
La empresa automotriz en su mejor momento llegó a liderar el mercado nacional, pero lo difícil de la situación hizo que el año pasado no lograran ensamblar ni un vehículo. Aun así, creyeron en el país, fueron optimistas y no se fueron”.
En aras de continuar con la producción y pensando en los mas de dos mil trabajadores; la compañía firmó cuatro acuerdos para proseguir la producción, el cual consiste en la importación de insumos con recursos propios, para ensamblar vehículos que luego se podían vender en dólares y bolívares.