Misión Robinson arriba a un aniversario más de actividades educativas

Un aniversario más cumple La Misión Samuel Robinson, en esta oportunidad, esta misión educativa arriba  a catorce años de creada. La misma fue lanzada por el extinto presidente Hugo Chávez Frías con la finalidad de atacar el analfabetismo entre la población adulta contemporánea y adulta mayor en todo el territorio venezolano. 

Misión Robinson arriba a un aniversario más. Un primero de julio del año 2003 surge la Misión Robinson, como proyecto pionero del desaparecido Comandante de la Revolución Bolivariana, Hugo Rafael Chávez Frías, convirtiéndose en un programa social que busca brindarles a las venezolanas y venezolanos la oportunidad de aprender a leer y escribir, lo cual es un derecho humano y un deber social fundamental, como lo es la educación, democrática, gratuita y obligatoria.

Misión Samuel Robinson

La Misión Robinson debe su nombre a uno de los intelectuales americanos más importantes de todos los tiempos, al escrior tSimón Rodríguez, quien decidió usar el seudónimo de Samuel Robinson durante un periodo de su vida en la que atravesaba difíciles momentos.

Misión Robinson, la hija predilecta del desaparecido Hugo Chávez

La Misión Robinson ha sido y sigue siendo punta de lanza de la Revolución Bolivariana y hoy día continua educando en las comunidades y desde las comunidades, a través de los círculos de lecturas que promueven la construcción de la patria socialista, completamente independiente y soberana y de los ambientes educativos que existen en cada comunidad y bases de misiones socialistas.

Misión Robinson incluye y no discrimina

La Misión Robinson demuestra su compromiso social en la atención a personas con diversidad funcional, edad y sexo, garantizando su incorporación e integración a la sociedad, mediante el estudio y el trabajo articulado entre las misiones y los consejos comunales para la construcción y fortalecimiento del tejido social.

Misión Robinson y su modalidad de enseñanza-aprendizaje

Misión Robinson contempla dos tipos de ambientes de aprendizajes; los puros, formados con patriotas que muestran necesidades especiales, que van desde las motrices, intelectuales, de audición o visión, síndrome de down, entre otras.

Y los integrados, que están conformados por personas o patriotas, con las mismas condiciones y sin ellas, de manera tal que se integren totalmente como individuos con capacidad de formarse adecuadamente y que puedan trabajar en equipo.

De igual manera, la Misión Robinson incluye a la población penitenciara al Sistema Educativo venezolano, proporcionado la oportunidad de alfabetizarse, proseguir al sexto grado de educación básica e incorporarse a los círculos de lecturas.

Además de proponerles la alternativa de acceder a un proyecto socio-productivo en áreas tales como la  carpintería, orfebrería, ebanistería, herrería, mecánica, talabartería agricultura, artesanía, corte y costura, pintura, entre otras, mientras están cursando la primaria a través de La Misión Robinson.